El fin de siglo XX estuvo marcado por la ansiedad global ante la llegada del año 2000, el temido “Y2K” fue un fenómeno que sembró el pánico en todo el mundo, con predicciones de fallos catastróficos en sistemas computacionales. Ahora, este evento histórico se convierte en el eje de una nueva comedia de desastre titulada Y2K, dirigida por Kyle Mooney y con un elenco que promete darle un giro humorístico a lo que muchos recuerdan como una noche llena de incertidumbre.
El reparto incluye a Jaeden Martell, Rachel Zegler, Julian Dennison, The Kid Laroi, y Fred Durst, quienes dan vida a personajes atrapados en el torbellino de un 31 de diciembre de 1999 que parece desmoronarse con cada tic-tac del reloj. La dirección de fotografía a cargo de Bill Pope y el diseño de producción por Jason Singleton crean una atmósfera que recrea a la perfección el ambiente de la época, mientras que la música supervisada por Maggie Phillips evoca la nostalgia de finales de los 90.
El guion, escrito por el propio Kyle Mooney junto a Evan Winter, se presenta como una mezcla entre homenaje y parodia del milenio, explorando los miedos irracionales que marcaron a una generación y cómo esos temores pueden parecer ridículos a la distancia de un par de décadas. Y2K promete risas y adrenalina, con un ritmo que te mantiene al borde del asiento mientras los protagonistas navegan entre el absurdo y lo surrealista.